Es de dominio público, porque lo hemos denunciado hasta la saciedad, que los suboficiales, a pesar de que nos hurtaron la posibilidad de ascender a oficial en activo, estamos realizando funciones y servicios de oficial ya desde el empleo de Sargento Primero, circunstancia cuya única consecuencia es una mayor exigencia en el trabajo y en las responsabilidades de los suboficiales; ninguna compensación. En ninguna administración pública se da un agravio similar.
Pues bien, este Plan viene a oficializar la mofa: “La ES ve potenciado su papel, asumiendo nuevas y mayores responsabilidades, fundamentalmente durante el segundo tramo de su Trayectoria”. Este eufemismo, traducido al cristiano, viene a decir que los Brigadas y los Subtenientes, como han demostrado sobradamente su eficacia, harán las funciones de los oficiales y a cambio recibirán unos miserables 10 créditos (ECTS) por si se les ocurre la peregrina idea de estudiar otros cinco años más para promocionar a lo que, de hecho, ya son, oficiales (a esas mismas alturas, nuestros compañeros de la Guardia Civil dispondrán de 120 créditos y solo necesitarán dos años).
Los Suboficiales necesitamos que alguien nos diga cuál es nuestro pecado original y qué bautismo es necesario para extinguirlo. ¿Hay alguien dispuesto a explicárnoslo?
Milites melancholicus.