El día 27 de julio tuvo lugar el segundo Pleno ordinario de 2022. Al mismo, y presidido por la Subsecretaria de Defensa, asistieron el Secretario General Técnico (SEGENTE), el Director General de Personal Militar (DIGENPER), el Director General de Reclutamiento y Enseñanza Militar (DIGEREM), el Subdirector General de Personal Militar, el Subdirector General de Enseñanza Militar, los Mandos de Personal de los Ejércitos y la Armada, el Director del Gabinete Técnico de la Subsecretaría de Defensa, el Secretario General Gerente del ISFAS y los representantes de las asociaciones profesionales que asistieron al Pleno, ASFASPRO, AUME, UMT y APROFAS.
DESARROLLO Y ASUNTOS TRATADOS MÁS IMPORTANTES
Clausura de la Comisión de trabajo Temporal para el estudio de la obtención del título de grado en la escala de Suboficiales y el desarrollo normativo asociado.
DIGEREM explicó que una orden ministerial recogerá los trabajos de la comisión. El convenio de colaboración con la UNED está casi cerrado a falta de la aprobación del Ministerio de Hacienda.
Así mismo manifestó que esperaba que pudiese ser de aplicación para el curso académico 2023/2024.
ASFASPRO agradeció el trabajo realizado y solicitó a los Cuarteles Generales de los Ejércitos y la Armada que potencien esta nueva forma de promoción interna del suboficial ofertando un número suficiente de plazas.
Clausura de la Comisión de trabajo Temporal sobre retribuciones.
DIGENPER entregó de manera física un amplio dossier de 500 páginas sobre los trabajos de la comisión. En su exposición se limitó a explicar el sistema retributivo actual y las míseras conclusiones del informe, sin aportar números o cifras de futuras mejoras salariales.
ASFASPRO explicó que la comisión ha culminado en el fracaso más absoluto, tal y como refleja el informe. No hay un plan concreto de mejora de las retribuciones, con cantidades más o menos aproximadas, ni fechas o hitos de desarrollo en varios presupuestos generales, nada. Las conclusiones del informe están muy por debajo de lo recomendado y deseado, máxime si tomamos como referencia el Dictamen de la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados de 6 de marzo de 2018 sobre el Informe Anual de 2016 del Observatorio de la Vida Militar. El ministerio ha tratado de obviar la comparación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE), argumento fundamental en 2005 en el incremento impulsado por el ministro Bono. ¿El trabajo del militar tiene menos valor que el de las FCSE? El principio de “igual remuneración por trabajo de igual valor” recogido tanto en el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y en el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea parece no regir para este Ministerio.
El resto de asociaciones presentes, excepto una que se considera a sí misma “transversal” y que se sintió satisfecha con la respuesta dada a sus aspiraciones, se manifestaron totalmente decepcionadas y denunciaron que se había perdido una gran ocasión para conseguir unas retribuciones dignas para el militar.
DIGENPER defendió su postura alegando que el trabajo de la comisión sólo consistía en estudiar las propuestas de las Asociaciones.
Sin permitir mayor debate, intervino la Subsecretaria de Defensa para defender el pequeño incremento de 2021 y la revisión de este año del CSCE de 976 puestos de trabajo (menos del 1% de la plantilla), afirmando que el ministerio estaba en el proceso de mejora de las retribuciones.
Propuesta de ASFASPRO sobre una nueva Ley integral de la Carrera Militar
Esta propuesta fue consensuada por ASFASPRO, ATME y UMT, siendo presentada al Consejo por las tres Asociaciones.
El Subdirector General de Personal Militar se encargó de argumentar la desestimación de la propuesta. Las normas vigentes funcionan bien, hay que darlas mayor estabilidad, su desarrollo normativo no está todavía finalizado y las dos Subcomisiones del Congreso de los Diputados que trataron sobre el régimen transitorio de la Ley de la carrera militar (2014) y sobre el régimen profesional de los militares de tropa y marinería (2018), aunque propusieron mejoras, apoyaron las normas actuales. Además, consideró que la operatividad era óptima.
ASFASPRO cuestionó cómo era posible afirmar que la operatividad era óptima gracias a las actuales leyes de personal y el representante ministerial respondió que viendo la participación de los Ejércitos en las Misiones Internacionales. Caben muchas interpretaciones alrededor de la citada respuesta, principalmente porque el fin de los ejércitos no es la participación en Misiones Internacionales.
Sin embargo, la realidad que no quiere reconocer el ministerio es que el descontento y la desmotivación siguen haciendo mella en el personal militar. Es conocida la fuga del recurso humano a otros ámbitos laborales, la renuncia a los ascensos, los problemas de cobertura de determinados puestos de trabajo, los problemas de conciliación familiar provocados por la movilidad geográfica, las bajas retribuciones y unas mediocres expectativas profesionales.
Propuestas de interés de otras Asociaciones:
- Pase voluntario a la reserva con 40 años de servicio: Fue estimada parcialmente. Según DIGENPER se va a realizar un estudio sobre el impacto que la medida podría tener en el funcionamiento de las Fuerzas Armadas. ASFASPRO se opuso a la propuesta porque en su redacción solo se refería a los cupos de reserva anuales -no de forma general- e incidió en el pase voluntario a la reserva con 35 años de servicio o 58 años de edad para oficiales y suboficiales.
- Flexibilidad horaria en el Cuartel General de la Armada: La propuesta presentada propone que se anule la IPOR en vigor sobre jornada y horario de trabajo en Unidades de la Armada, y más específicamente en lo relativo al Cuartel General de la Armada, y que se realice una nueva Instrucción ya que no existen (según la Asociación) “unas especiales condiciones de trabajo y de ubicación” y la actual presenta un perjuicio toda vez que , “con las mismas horas de trabajo la distribución de horario es diferente entre personal residente en Madrid y no residente.”
ASFASPRO estará atenta a los perjuicios que la nueva redacción de la IPOR pueda ocasionar.
- Exención de IRPF en misiones internacionales: ASFASPRO presentó sobre este asunto varias propuestas al Consejo durante los años 2020 y 2021 y sin embargo, el ministerio se negó a debatirlas.
Se aceptó parcialmente. Según el Director del Gabinete Técnico de la Subsecretaría de Defensa se reiterarán las consultas al Ministerio de Hacienda, se dará información a los afectados y el Ministerio de Defensa remitirá, cuando lo reciba, el procedimiento de Hacienda sobre exención del IRPF cuando se participe en misión internacional. La Operación Libre Hidalgo del Líbano sigue excluida por considerarse ese país paraíso fiscal.
ASFASPRO insistió en que el Ministerio de Defensa debe instar al de Hacienda para que se modifique el Artículo 7 p de la Ley 35/2006 del Impuesto sobre la renta de las Personas Físicas en el sentido de que se declare expresamente exentas de tributación los rendimientos del trabajo devengados durante los días de estancia en el extranjero l por parte de los miembros de las Fuerzas Armadas participantes en misiones internacionales, de paz o humanitarias
Ruegos y preguntas:
ASFASPRO presentó cuatro preguntas y dos ruegos. Todas ellas serán contestadas por escrito y no hubo debate alguno en el Pleno.
Las preguntas fueron:
Los dos ruegos fueron:
El pleno extraordinario de retribuciones del Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas celebrado ayer por la tarde fue convocado de urgencia para dar trámite a un proyecto de modificación del reglamento de retribuciones de las Fuerzas Armadas que incrementa el componente general del complemento de empleo (CGCE) entre 17’12€ y 59’92€ mensuales en función del empleo militar.
Es una noticia agridulce: por un lado es bien recibida porque se trata del primer aumento –más allá del IPC- en muchos años, y algo es algo; por otro, son cantidades realmente pequeñas. El Ministerio de Defensa insiste en computar como aumento para el personal militar el 0’9% aplicado a todo el personal de la Administración a primeros de año. Además, ha realizado algunos incrementos en el componente singular del complemento específico sin modificar el reglamento y de espaldas al propio Consejo de Personal y a las asociaciones. A pesar de todo ello, no se elimina el gran escalón existente entre los salarios militares y el de ámbitos similares como las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El tiempo transcurrido entre la solicitud del pleno y su celebración, con el estado de alarma finalizado y ya en la nueva normalidad, ha supuesto un cambio de situación, pero siguen subsistiendo problemas o se generan nuevos enraizados en la crisis del coronavirus.
A diferencia del pasado pleno extraordinario sobre el mismo tema, hemos recibido promesas de respuesta -que no es lo mismo que soluciones- a las cuestiones planteadas. Por otro lado, es alarmante el silencio que la ministra Robles guarda en lo relativo a las retribuciones, continuando con el agradecimiento de palabra, pero no con hechos. Ofrecer el caramelo del CDE del mes de agosto a los implicados en la Operación Balmis es una burla frente a la subida de sueldo del 20% de todos los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El Gobierno ha dejado de estar en funciones, sin embargo, parece que las nuevas excusas para no mejorar las retribuciones o la carrera profesional serán las dificultades para aprobar la Ley de Presupuestos Generales y la fragmentación del Congreso de los Diputados.
ASFASPRO ha puesto sobre el tapete una y otra vez los problemas con las retribuciones y la carrera del militar, viendo como otros colectivos siguen mejorando en ambos aspectos. Las excusas, pasadas y futuras, ya no sirven y es hora de tomar conciencia de que sólo la movilización en la calle puede remover los obstáculos que impiden los progresos.