Publicado el 30/10/2015 en http://www.ejercitodelaire.mde.es/
Hoy es un día muy triste para toda nuestra familia; el capitán José Morales Rodríguez, el teniente Saúl López Quesada y el sargento Jhonander Jossué Ojeda Alemán han emprendido su último vuelo. Han sido fieles a su juramento y vocación de servicio y su entrega nos entristece, pero también nos muestra el camino y nos ha de servir de estímulo.
Todos los que vestimos este uniforme compartimos el dolor de las familias y de los compañeros más próximos. Estos últimos días, desde su desaparición, han estado marcados por la angustia causada por la ausencia, los esfuerzos de la búsqueda y las frustradas esperanzas. Hoy sabemos que ya no van estar con nosotros, pero también, que su recuerdo no nos abandonará nunca, tres aviadores más se nos unirán en cada despegue; una tripulación leal que nos protegerá junto a la Virgen de Loreto y nos recordará el valor de nuestra hermosa profesión.
Son momentos de dolor y tristeza, pero también han de serlo de esperanza y compromiso, por delante hay una tarea tremenda a la que seguir dedicando todo nuestro esfuerzo. Desde su creación, los componentes del Servicio de Búsqueda y Salvamento han pagado un precio elevadísimo por cumplir con una vocación de servicio y entrega a los demás, pero ello no ha hecho sino servir de estímulo en la tarea para ser cada vez mejores.
Compañeros, nos sentimos en deuda con vosotros; vuestro último vuelo nos hace más fuertes. Nos queda el compromiso de amar a nuestra profesión y servir a España y a los españoles como vosotros lo habéis hecho; sin esperar nada a cambio, sólo la satisfacción del deber cumplido. Podéis estar seguros que no vamos a desfallecer en la tarea, que vuestro sacrificio no es en vano y que honraremos vuestro legado.
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