Nueva acción en el Báltico
A estas cuatro operaciones militares habrá que sumar, a partir del 1 de enero, una misión de la OTAN con cuatro aviones de combate Eurofighter en la base aérea de Ämari (Estonia) durante cuatro meses, como medida de refuerzo a los países del Este tras la amenaza de Rusia en Ucrania. Y, cómo no, las otras misiones nacionales que desempeñan, con carácter permanente, para la vigilancia y el control del espacio aéreo de soberanía nacional.
¿A qué retos fundamentales se enfrenta el Ejértico del Aire en nuestros días? «Con el progreso y el desarrollo tecnológico, el poder aeroespacial se asienta más y más profundamente como pilar fundamental de la seguridad y la defensa. El control de un espacio aéreo cada vez más transitado, tanto de aeronaves pilotadas (directa o remotamente) como de satélites, donde la velocidad de los medios aéreos, aeronaves y misiles también se incrementa obligando a tiempos mínimos de reacción, se está convirtiendo en una de las misiones más complejas que el Ejército del Aire tiene asignada», advierte el jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire, F. Javier García Arnaiz, al inicio de su documento oficial «Visión del Jema».
«La posibilidad de utilizar muchas de esas plataformas con fines terroristas o de inteligencia, fuerza ya desde tiempo de paz a que ese control aeroespacial garantice la seguridad de forma permanente, las veinticuatro horas del día, y sin interferir en el funcionamiento de la aviación civil», recalca, obviamente influenciado por los acontecimientos del 11-S que cambiaron el carácter de la Defensa aérea de los países occidentales.
Pero volemos en el tiempo a ese 7 de octubre de 1939, fecha en el que. al fin, el Arma aérea obtiene el grado de Ejército con una estructura basada en cinco regiones aéreas (Centro, Estrecho, Levante, Pirineo y Cantábrico) y tres fuerzas aéreas destacadas (Baleares, África y Atlántico), nutriéndose evidentemente de los aviones y aeronaves que ambos bandos utilizaron durante la Guerra Civil.
Aviones de la Guerra Civil
Nómbrese aquí a los soviéticos Polikarpov «Natacha» o los nazis Heinkel He 111. En este punto recomendamos una visita obligada al Museo del Aire -en Cuatro Vientos (Madrid)- donde el visitante comprobará que la fecha de 1939 en España no fue sino la que vino a estructurar, orgánicamente, el uso cada vez más predominante de los aviones en operaciones militares, cuyo «bautismo de fuego» fueron las distintas campañas africanas en Marruecos (1909-1927).
Un fin de la Guerra Civil que además originó al... actual Atlético de Madrid (sí, fútbol). Recuérdese que el Atleti tiene su origen en el Athletic Club de Madrid (fundado en 1903 por un grupo de estudiantes vascos en Madrid) al fusionarse con el Aviación Nacional, sección deportiva del Ejército del Aire. Tras esa fusión conquistaría las ligas del 39/40 y el 40/41, para empezar. Ya en 1946 tomaría su actual denominación. La Guerra Civil también trajo para los aviones el distintivo de cola de la cruz de San Andrés (negra sobre blanco), adoptado por el bando franquista para evitar confusiones en el aire con otros aparatos.
Tipos de aeronaves ha habido muchos en la aviación militar española:85 históricas y unas 23 operativas ahora, de las cuales sus «ases» son los cazas Eurofighter y F-18 y los aviones de transporte C-130 y C-295, y a la espera de incorporar los primeros helicópteros NH-90.
Requerimos al general García Arnaiz su particular lista de aeronaves en la historia del Ejército del Aire, siete para siete décadas. He aquí el resultado: 1. Bucker, el avión donde volaron por primera vez todos los pilotos del EA durante los 50 años que estuvo en servicio; 2. Saeta, primer reactor diseñado y fabricado en España; 3. T-33, primer reactor norteamericano del Ejército del Aire; 4. Sikorsky Westland S-55, primer helicóptero; 5. Aviocar, primer éxito de la industria nacional española; 6. F-18, la espina dorsal de la aviación de combate desde hace más de 25 años; 7. Eurofighter, primer programa europeo en el que se integra España.
Obviamente, más allá de los aparatos (también radares, misiles, armas,...), antes están las personas que integran el Ejército del Aire. Actualmente 24.900 militares y civiles trabajan en el Arma aérea... el Ejército de las «alas gloriosas de España», que reza el himno.