España se situaría así un paso por detrás de Londres y París, que han hablado abiertamente de intervenir militarmente en Siria, si se confirma el uso de ese tipo de armas, aunque no haya una resolución del Consejo de Seguridad. El portavoz de Asuntos Exteriores no se refirió a esa hipotética resolución, que sería difícil de conseguir por las reticencias de Rusia y China, pero si dijo textualmente que «España considera que para cualquier acción de fuerza es preciso contar con una base jurídica que la respalde». .
Apoyo en la legislación internacional
El Ejecutivo español, en cualquier caso, recuerda que hay una amplia legislación internacional que condena el uso de armamento químico, y el portavoz subrayó que «la legislación internacional sobre armas químicas es vinculante, es decir tiene fuerza legal», palabras que pueden ser interpretadas como una puerta abierta a secundar una acción contra el régimen sirio, una vez que se demostrara que ha utilizado ese tipo de armamento.
Por su parte, el PSOE, a través de su vicesecretaria general, Elena Valenciano, se mostró partidario de acciones «proporcionadas, pero contundentes» sobre Siria si se demuestra el ataque con armas químicas. Indicó que, en ese caso, la acción internacional «debería ser urgente e imprescindible». El PSOE ha pedido la comparecencia de García-Margallo en el Congreso de los Diputados, para que explique que acciones está desarrollando España para promover un consenso internacional que evite «errores que se han cometido en relación a otros escenarios».